23/08/2017

Nil Solans Baldó, piloto RACC de 25 años natural de Matadepera (Barcelona), consiguió el pasado domingo, en Alemania, su primer título mundial al proclamarse campeón de la categoría WRC3 gracias a sus victorias en Cerdeña y Polonia, la segunda plaza lograda en Córcega, Portugal y Finlandia y la tercera en el reciente Rallye de Alemania.

Un expediente brillante para el joven barcelonés que en los años 2015 y 2016 ganaba las GSeries (carreras sobre hielo en Andorra) dentro de su etapa de formación, contando también con dos victorias junto a su habitual copiloto, Miquel Ibáñez, en el Campeonato de España de Rallyes sobre Tierra, concretamente en Cervera y Riolobos en 2014 con un Mitsubishi Lancer Evo X. Cualidades no le faltan a Nil, que en el RallyRACC podría certificar el otro título por el que está luchando en el mundial, el JWRC.

¿Sorprendido con el título de WRC3 teniendo en cuenta que el objetivo inicial parecía el JWRC?
No, porque realmente son dos campeonatos en los que competimos con el mismo coche, el Ford Fiesta R2T y casi los mismos rallyes excepto Portugal, que fue donde nos dimos cuenta de que teníamos opciones de lograr el título, aunque sí es verdad que este triunfo ha llegado antes de lo esperado, pues no esperábamos conseguirlo en Alemania.

¿En qué ha cambiado aquel Nil Solans que comenzaba en el mundial en 2014 con el actual?
Ahora tengo bastante más experiencia y como persona he madurado muchísimo, lo que se nota en cada rallye al que acudimos.

Has pasado ya por el mundial, por los Campeonatos de España de asfalto y de tierra e incluso por el certamen francés, pero quizá no has dado los que podrían ser considerados como pasos naturales para un piloto joven que comienza a competir. ¿Qué razones te llevan a orientarte tan claramente hacia el mundial?
Está claro que mucha gente pensaba que nos equivocábamos, pero nosotros éramos conscientes de que teníamos unas cualidades que debíamos explotar y aprovechar. Los pilotos de rallyes que están en el mundial ya tienen una edad y atesoran una experiencia que a nosotros nos faltaba. Si hubiésemos seguido ese camino más lógico, comenzando por ejemplo en el Volant RACC, pasando luego a la Copa Suzuki Swift y posteriormente al nacional de rallyes, creo que hasta los 30 años no tendríamos la oportunidad de estar en el Campeonato del Mundo y eso para nosotros sería demasiado tarde. Por todos estos motivos enfocamos nuestro objetivo hacia el WRC desde el inicio.

¿Crees que este título te puede abrir puertas a nivel de patrocinadores?
Sí, eso siempre ayuda pues no es lo mismo escuchar a un chico de 25 años que te dice que lo hace muy bien que uno que llega como Campeón del Mundo. La percepción para el posible apoyo que vayas a recibir es muy diferente.

Has intentado formarte en todas las superficies, incluido hielo y nieve, ¿en cuál te sientes más cómodo y por qué?
No lo sé, me gustan mucho todas, conducir en general me apasiona, así que es complicado elegir una. En mi caso disfruto más en asfalto que en tierra. Esa sensación de ir rápido sobre el asfalto me encanta, pero en el hielo también me siento cómodo, tanto en coche como en moto, a pesar de que todavía no he podido hacer ningún rally sobre esta superficie.

¿Hay algún plan de cara a la próxima temporada o vas a esperar a que finalice esta?
Vamos a intentar terminar la actual a ver como acaba el RallyRACC, donde nos jugamos el poder realizar tres carreras más con un Ford R5 en 2018, además del título en el JWRC.